La prostatitis es la inflamación de la próstata. Esta es una glándula que tiene solo el hombre y que se encuentra por delante del recto (parte final del tubo digestivo) y justo debajo de la vejiga (donde se almacena la orina). La próstata normal es del tamaño de una nuez y su peso es de 20 gramos. Por el interior de esta glándula pasa la uretra (tubo que lleva la orina desde la vejiga hasta la punta del pene). La próstata está formada por pequeños conductos y por músculo. Su función es producir unos líquidos que se unen al semen (líquido que transporta los espermatozoides producidos en el testículo). Durante el orgasmo (parte final del acto sexual) los músculos de la próstata expulsan liquido prostático a la uretra para que unido al semen salga al exterior durante la eyaculación.
Existen tres tipos de prostatitis:
- Prostatitis aguda.
Es producida por bacterias y como lo indica su nombre aparece bruscamente y se manifiesta por fiebre, escalofríos, dificultad y dolor al orinar. Es un cuadro severo que requiere el ingreso inmediato para inyectar antibióticos directamente en una vena. - Prostatitis crónica.
También es producida por bacterias pero no se presenta bruscamente y los síntomas son menos intensos caracterizados por molestias debajo de los testículos o debajo del ombligo. Se asocia con infecciones de orina repetidas. El paciente no debe ser ingresado. Se trata con antibióticos por boca. - Prostatitis no infecciosa (prostatodinia).
No es causada por bacterias y su causa es desconocida. Los antibióticos no son efectivos.
La prostatitis no es contagiosa y no es considerada como enfermedad de transmisión sexual.
No se conoce con certeza cuál es la causa por la que se produce la prostatitis. Las bacterias pueden ascender desde el exterior a través de las paredes de la uretra e infectar el tejido de la próstata. Existen ciertas condiciones o procedimientos que aumentan el riesgo de contraer una prostatitis:
- a) Colocación recientemente de algún instrumento por la uretra (sonda, cistoscopio, etc).
- b) Realizar relaciones sexuales por vía anal.
- c) Tener alguna anormalidad en el aparato urinario.
- d) Haber tenido recientemente una infección de orina.
- e) Tener la próstata grande (hiperplasia benigna de próstata).
Los síntomas de prostatitis dependerán del tipo de enfermedad que usted presente. Puede no sentir nada o presentar síntomas tan bruscos y severos que lo obliguen a acudir a un servicio de urgencia. Cuando hay síntomas, pueden ser cualquiera de los siguientes: fiebre, escalofríos (tiritonas), orinar muy frecuentemente durante el día o la noche, dificultad para orinar, quemazón al pasar la orina, dolor entre los testículos y el ano (periné), sangre en la orina (hematuria) o dolor durante la eyaculación. Los síntomas de prostastitis pueden simular los síntomas presentados por otras enfermedades de la próstata como la hiperplasia benigna de próstata o la uretritis (inflamación e infección de la uretra).
Para facilitar el diagnóstico de prostatitis el médico le realizará un tacto rectal (poner un dedo en el recto para informarse sobre el tamaño de la próstata, la consistencia, la presencia de dolor, nódulos duros sospechosos de tumor, inflamación o acúmulos de pus). Si su médico sospecha que usted tenga una prostatitis lo enviará a un urólogo para que confirme el diagnóstico.
Cuando se sospecha una prostatitis se debe realizar un masaje de la próstata para recoger líquido producido en la glándula y estudiarlo con el microscópio para encontrar bacterias o leucocitos (signo indirecto de la presencia de infección)
El tratamiento es diferente según el tipo de prostatitis que usted presente. Si usted tiene una prostatitis aguda seguramente necesitará ser ingresado para administrarle antibióticos directamente en una vena durante 2 o 3 días y al ser dado de alta deberá continuar con antibióticos por boca durante 2-3 semanas.
La prostatitis crónica necesitará antibióticos por un plazo de tiempo mas prolongado y que oscila entre 4 y 12 semanas con lo que se consigue la desaparición del cuadro en aproximadamente el 60% de los casos. Para los casos que no responden a este tratamiento se necesitará tratamiento a bajas dosis durante mas tiempo.
Si usted presenta una prostatodinia, no necesita recibir antibióticos y según los síntomas que presente necesitará otros medicamentos como pueden ser los alfa bloqueantes (sustancias que relajan el músculo que se encuentra en la próstata por lo que se reduce la dificultad para orinar). Los baños de asiento y la dieta puede ayudarlo a mejorar sus síntomas.
Aunque la prostatitis no favorece la aparición de cáncer, recuerde que después de los 50 años de edad usted debe ser controlado anualmente por un urólogo para detectar precozmente la aparición de un cáncer de próstata. En caso de que usted tenga familiares que hayan presentado un cáncer de próstata (padre, hermanos, abuelo, tíos) el control debe comenzar a los 40 años de edad tal como lo recomienda la Sociedad Norteamericana del Cáncer.